MÚSICA/CINE: Murió Leonardo Favio
El artísta, ícono de la cultura nacional argentina, falleció a los 74 años de una enfermedad respiratoria.
Cantante, actor y director de cine, Leonardo Favio venía sufriendo desde hacía años de problemas crónicos de salud que afectaban su sistema respiratorio y que en los últimos tiempos se había agravado.
Puede ser considerado un artista completo ya que no solo fue exitoso como cantante y precursor de las baladas románticas argentinas de los años 60 y 70 sino que posteriormente se convirtió en un aplaudido cineasta que dejó profundas huellas en el cine argentino.
Nacido el 28 de Mayo de 1938 en Luján de Cuyo, Mendoza, bajo el nombre de Fuad Jorge Jury y que posteriormente, por razones artísticas, cambió su nombre a Leonardo Favio, fue primero actor de radioteatro.
Más tarde se convirtió en cantante y compositor y en total lanzó 25 discos de los cuales dos canciones se hicieron inmortales: «Fuiste mía un verano» y «Ella ya me olvidó».
A pesar de su éxito como músico comenzó a escribir guiones sin descuidar su faceta de cantante.
Su primera obra cinematográfica fue el cortometraje “El Amigo” de 1960 y le siguieron los largometrajes “Crónica de un niño solo”, “El romance del Aniceto y la Francisca”, “Gatica, el mono” (quizás su film más recordado), “Juan Moreira”, “Soñar, soñar”, “Nazareno Cruz y el lobo”, “Perón, sinfonía del sentimiento”.
Por su carrera cinematográfica recibió importantes distinciones entre las que se destacan los premios Goya y el premio de la Asociación de Críticos Cinematográficos.
Fue un destacado seguidor peronista sentimiento que volcó en su filmografía principalmente en “Gatica, el mono” y “Perón, sinfonía del sentimiento”, esta última con una duración de 6 horas.
Así como los grandes personajes de la historia tenían sus íconos (Chaplín, su sombrero y su bastón; Sherlock Holmes su pipa y su gorro de cazador), Leonardo Favio llevaba un pañuelo en su cabeza que lucía casi como un amuleto.
Esa es la imagen que nos quedará grabada de este extraordinario artista argentino cada vez que rememoremos su rostro al escuchar las estrofas de “Fuiste mía un verano” o “Ella ya me olvidó” o cuando veamos alguna repetición de “Gatica, el mono” en nuestra TV y comentemos a nuestros familiares y amigos “mirá esta película es de Leonardo Favio”. Ese es su eterno legado.
¡Hasta siempre, Artista!
